Microestados: Formas de Gobierno y Rerlaciones Internacionales

Los llamados Microestados o Miniestados son Estados soberanos con una población o un territorio (o ambos) muy reducido. A pesar de ello, estos países ejercen una amplia influencia en la Asamblea General de las Naciones Unidas, ya que la estructura de la misma establece que cada Estado tiene un voto. Además, hay que tener muy en cuenta que los Microestados también se destacan por la emisión y recepción de viajeros gubernamentales e institucionales. Países como Mónaco, el Vaticano o Singapur, mantienen amplias relaciones internacionales con gran cantidad de países, lo que fomenta el incremento de desplazamientos de este tipo hacia su territorio, así como de sus propios mandatarios a otros países.

Los Microestados de mayor relevancia a nivel mundial se encuentran en el continente europeo. No obstante, repartidos por el resto del mundo, también se pueden encontrar diferentes Microestados de amplia trascendencia en el panorama de las relaciones internacionales.

Grandes Microestados europeos.

El mejor ejemplo de Microestado es el más pequeño de ellos en superficie; la Ciudad del Vaticano.Como comentábamos en la introducción de este artículo, a pesar de su reducida población (618 personas en el año 2018) y sus escasos 0.44 km de territorio, su gobierno teocrático en forma de monarquía absoluta, es uno de los más influyentes del mundo, aun sin ser miembro de las Naciones Unidas, sino observador permanente de su Asamblea General. Todo ello hace que, tanto las relaciones internacionales de la Santa Sede, como los viajes GITT de su jefe de Estado, el Papa, sean bastante habituales.

Además, la Ciudad del Vaticano alberga la máxima institución de la Iglesia Católica: la Santa Sede. Es esta última quién mantiene las relaciones diplomáticas con los demás países del mundo, con el Papa como Jefe de estado y máxima autoridad, ostentando los poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Es por este motivo por el que, prácticamente a diario, el Vaticano recibe visitas de tipo GITT; ministeriales, de Jefes de Estado, etc., gracias a la expansión de la Iglesia Católica a nivel global. Asimismo, dada su situación geográfica (este Microestado se encuentra dentro de la ciudad de Roma, capital de Italia), los desplazamientos de tipo gubernamental e institucional que se dirigen a la Ciudad del Vaticano son, por ende, recibidos también por la ciudad de Roma que es, además, quien acoge, logísticamente, a las delegaciones.

Por su parte, el Principado de Mónaco es uno de los Microestados europeos con mayor trascendencia histórica en lo que a relaciones exteriores se refiere. Entrada la edad moderna, el principado estuvo ligado a Italia, España, Francia y el Reino de Cerdeña. Su independencia fue formalmente reconocida hacia 1861, a pesar de que, tras la IGM (Primera Guerra Mundial), volvió a convertirse en un protectorado francés. En la actualidad, se encuentra gobernado por una monarquía constitucional, con el Príncipe Alberto II de Mónaco (Albert Alexandre Louis Pierre Grimaldi) como Jefe de Estado.

Los Grimaldi, dinastía que reina en el principado desde hace más de siete siglos, mantiene estrechas relaciones con el resto de casas reales de Europa, así como con otros Jefes de Estado no pertenecientes a la realeza. Esto hace que los desplazamientos de tipo oficial o privado de personalidades gubernamentales e institucionales al principado sean muy frecuentes y que las recepciones oficiales, eventos GITT y reuniones entre altos mandatarios, se repitan con cierta regularidad.

Al respecto de sus misiones diplomáticas, cabe destacar que sólo tres países mantienen embajadas en el principado; Francia, Italia y la Soberana Orden de Malta. Sin embargo, el número de consulados en el país es de más de setenta.

Pese a ello, Mónaco participa activamente en la Organización de las Naciones Unidas y se unió al Consejo de Europa en 2004. Además, es miembro de varias organizaciones internacionales como la UNESCO, la Interpol o la OMS, por lo que los viajes de tipo GITT que tanto su gobierno, como su jefatura de estado realizan, son bastante constantes.

Por su parte, el Principado de Andorra, gobernado mediante un coprincipado parlamentario, por el cual la jefatura de estado se reparte en dos personas que ejercen el cargo de manera conjunta e indivisa, hace que las relaciones internacionales del país pirenaico se intensifiquen, sobre todo con España y Francia. Esto se debe, además de por situarse geográficamente en la frontera entre estos dos países, a que los cargos son siempre ocupados por el Obispo de la Seo de Urgel (España) y por el Presidente de la República Francesa. De esta manera, ambos asumen, desde el momento de su respectivo nombramiento, el título de copríncipes de Andorra, y por lo tanto, la función de más alta representación del Principado con la comunidad Internacional, y especialmente, con sus países vecinos.

Sin embargo, Andorra tal vez no tenga la importancia internacional de los anteriores ejemplos, pero, a pesar de ello, ha realizado un importante esfuerzo de apertura en los últimos 10 años, culminando este proceso con la primera visita de un jefe de Estado español al país pirenaico en 2021. El Rey Felipe VI quiso reconocer los esfuerzos de Andorra en el cumplimiento de las mejoras en transparencia fiscal que la Unión Europea venía exigiéndoles, y se consideró la antesala de la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebró en el país pirenaico, en abril de 2021, de forma semipresencial.

Otro principado que forma parte de los seis Microestados europeos es Liechtenstein, fuertemente ligado a lo largo de su historia al Sacro Imperio Romano-Germánico, y más recientemente, a Austria y Suiza, países entre los que se encuentra ubicado geográficamente. El principado está gobernado en el presente por una monarquía constitucional, encabezada actualmente por el príncipe Juan Adán II, Jefe de Estado. En cuanto a las relaciones internacionales de este principado, se destaca su pertenencia al Espacio Económico Europeo, a través de la Asociación Europea de Libre Comercio y del Acuerdo de Schengen, aun no siendo miembro de la Unión Europea, lo que lo convierte en el único Microestado miembro de esta Asociación.

Además, tanto el Primer Ministro del principado, como su Jefe de Estado, realizan numerosos viajes oficiales, puesto que los pilares de sus relaciones internacionales son el mantenimiento de lazos con los países vecinos, la cooperación con la Unión Europea y el gran compromiso tomado con las organizaciones multilaterales. No obstante, dada su condición de Microestado, Liechtenstein cuenta con pocas Embajadas y representaciones Permanentes, y no cuenta con Embajadores residentes de otros países en su territorio.

Microestados fuera de Europa.

Como comentábamos en la parte introductoria de este artículo, fuera del continente europeo también se destacan Microestados de suma importancia en el panorama internacional, tales como Singapur. Con una superficie total de 730 km², alberga una población que supera los cinco millones y medio de habitantes y ha sido sede de importantes eventos a nivel internacional, como el primer encuentro entre un presidente en funciones de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, en 2018. Además, Singapur es sede de numerosos eventos relacionados con gran cantidad de ámbitos diferentes y recibe a jefes de Estado de todo el mundo con cierta regularidad.

Este Microestado asiático, además, mantiene relaciones bilaterales con multitud de países, pertenece a la ONU (Organización de las Naciones Unidas) desde su independencia en 1965, y a la OMC (Organización Mundial del Comercio) desde 1995, además de haberse convertido en el primer miembro asociado de la Alianza del Pacífico al firmar un acuerdo de libre comercio con ésta asociación, formada por Chile, Colombia, México y Perú. Todo ello contribuye, tanto a la recepción, como a la emisión de viajes de tipo gubernamental e institucional, que estrechan los lazos entre naciones y acercan posturas en temas relativos a comercio, inmigración, tecnología, y un largo etcétera.

Otros ejemplos de Microestados que se encuentran fuera del continente europeo son las Islas Marshal, las Seychelles o Barbados, pequeños-grandes Estados que también cuentan con buena presencia en eventos de tipo gubernamental a nivel internacional.

Conclusiones.

Pero, a pesar de estos ejemplos, no todos los Microestados gozan del estatus y el éxito de los anteriores. Algunos de ellos, como Nauru o Tuvalu, que se encuentran muy alejados de todo y muy limitados en sus comunicaciones aéreas y marítimas, se mantienen con unos niveles de turismo y economía que distan mucho de los de sus compañeros Microestados nombrados más arriba.

Si bien la mayoría de estos microestados gozan de buena salud económica y turística, y mantienen relaciones internacionales con una gran cantidad de países. Además, se constituyen como importantes piezas dentro de la geopolítica global y participan activamente en cumbres, foros, simposios, etc., lo mismo como invitados, que como anfitriones. Todo ello confirma, una vez más, la importancia que adquieren los desplazamientos de tipo GITT (Governmental and Institutional Travel and Tourism), para la economía, el turismo y la presencia internacional de todos los países.