Los llamados Microestados o Miniestados son Estados soberanos con una población o un territorio (o ambos) muy reducido. A pesar de ello, estos países ejercen una amplia influencia en la Asamblea General de las Naciones Unidas, ya que la estructura de la misma establece que cada Estado tiene un voto. Además, hay que tener muy en cuenta que los Microestados también se destacan por la emisión y recepción de viajeros gubernamentales e institucionales. Países como Mónaco, el Vaticano o Singapur, mantienen amplias relaciones internacionales con gran cantidad de países, lo que fomenta el incremento de desplazamientos de este tipo hacia su territorio, así como de sus propios mandatarios a otros países.
Los Microestados de mayor relevancia a nivel mundial se encuentran en el continente europeo. No obstante, repartidos por el resto del mundo, también se pueden encontrar diferentes Microestados de amplia trascendencia en el panorama de las relaciones internacionales.